Finalizado el conflicto armado interno peruano, son diversos los organismos de la sociedad civil que han sido atacados por grupos políticos de derecha cercanos al fujimorismo o por defensores de la denominada «memoria salvadora». Una de las instituciones más vulneradas ha sido la Asociación Pro Derechos Humanos (Aprodeh). Fundada en 1983, esta institución ha tenido un papel importante en la defensa de los derechos humanos durante el proceso posterior a la guerra interna. A continuación, repasamos brevemente algunos de los ataques más conocidos que este organismo afrontó.
Un oficio público del 2004 dirigido a la Fiscalía de la Nación y el Ministerio de Justicia da cuenta de los primeros ataques que ha sufrido Aprodeh a lo largo de su trayectoria. El documento, firmado por la abogada Gloria Cano, detalla cómo esta recibió amenazas de muerte en ese año por llevar el caso judicial de las familias de tres miembros del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA). Estos fueron ejecutados extrajudicialmente durante la famosa operación militar ejecutada por el Comando Chavín de Huántar, el cual liberó a los rehenes (secuestrados por el MRTA) que se encontraban en la residencia del embajador de Japón en Lima, en abril de 1997.
Gloria Cano se encontraba en las oficinas de Aprodeh, en Lima, el 20 de octubre de 2004 cuando recibió la amenaza mediante un mensaje de texto en su teléfono móvil. El mensaje decía: “Hola, perra, no estamos en la cárcel, cuídate hasta de tu sombra, te vas a reunir con el terruco en el infierno yelmo”. La amenaza se recibió al día siguiente de la publicación de un comunicado de prensa de Aprodeh, el cual manifestaba la preocupación por la posible liberación de Vladimiro Montesinos (ex asesor presidencial de inteligencia), Nicolás Hermoza Ríos (excomandante en jefe de las fuerzas armadas) y Roberto Huamán Azcurra (exdirector del Servicio de Inteligencia Militar), que habían ocupado cargos durante el gobierno del expresidente Alberto Fujimori. Los tres habían permanecido detenidos los últimos 18 meses por su presunta implicación en el homicidio de los tres miembros del MRTA.
Un año antes de este suceso, en 2003, la abogada Gloria Cano fue objeto de un ataque similar. En enero de 2003, cerca de las instalaciones de Aprodeh, Cano fue insultada y golpeada por un grupo de personas no identificadas. Este ataque pareció estar relacionado con la campaña emprendida por Aprodeh para que se extraditara a Alberto Fujimori desde Japón, de tal manera que los atacantes de Cano podrían haber estado vinculados al fujimorismo. Las miradas y sospechas se dirigían a un núcleo de operadores al mando del comandante Gerardo Rejas Tataje, excomando Chavín de Huántar. Rejas y sus compañeros tuvieron por esos años especial relevancia en estos ataques violentos hacia personas y/o organizaciones civiles. Años después, en el 2007, Rejas pintó de naranja los rostros de sus seguidores –por lo que fueron bautizados como los “caras pintadas”– y se aprestó a bloquear el paso de los ómnibus que transportaban a los abogados, testigos y familiares de las víctimas de Barrios Altos y La Cantuta en el marco del megajuicio en la Diroes contra Alberto Fujimori. El objetivo fue impedir la apertura del juicio. Este comando se estuvo estructurando desde el 2003, pues su primera acción habría sido, justamente, el ataque a Gloria Cano y al local de Aprodeh. Este hecho fue liderado por José Contreras Jimeno, lugarteniente de Rejas Tataje, conocido con el mote “Banzai” (grito de lucha japonés).
En el 2008, Aprodeh y su fundador, Francisco Soberón, fueron objeto de una serie de ataques por parte de altos funcionarios del Estado peruano, quienes los acusaron de defender a terroristas. Estas agresiones se originaron a partir de una carta que Aprodeh había enviado al Parlamento Europeo en la que manifestaba su opinión sobre la inclusión del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) en la lista de organizaciones terroristas de la Unión Europea.
En su carta del 22 de abril, Aprodeh hacía explícita su posición de rechazo a todo acto terrorista y dejaba en claro su distanciamiento de los hechos perpetrados por Sendero Luminoso y el MRTA durante la época del conflicto armado interno. Asimismo, en una parte de la carta se colocó lo siguiente: «Desde hace ocho años no se conocen actividades del MRTA (…)»; además, señalaron que incluir a esta agrupación en la lista podría «(…) sobredimensionar la existencia y actividad de un grupo como el MRTA que puede servir para perseguir a activistas sociales y opositores políticos, acusándolos injustamente del delito de terrorismo».
Carta del 22 de abril del 2008 que Aprodeh envió al Parlamento Europeo y que originó ataques e insultos por parte de funcionarios del Estado peruano.
El 24 de abril de ese mismo año, el Parlamento Europeo decidió no incluir al MRTA en la lista de organizaciones terroristas. Los congresistas de la República y los representantes del Gobierno culparon como principal responsable de este hecho a Aprodeh. Por ejemplo, el presidente del Perú en ese entonces, Alan García, llamó «traidores de la patria» a Aprodeh, mientras que algunos parlamentarios lo tildaron de hacer «apología al terrorismo». Los ataques no se detuvieron por ningún flanco. Desde el Ejecutivo, las autoridades declararon públicamente la intención de presentar denuncias contra Aprodeh por presuntas conexiones al terrorismo. El canciller peruano, José Antonio García Belaunde, lamentó la actuación del Parlamento Europeo durante una presentación en el Congreso, a donde fue invitado para explicar el tema. “El MRTA es una organización terrorista, diga lo que diga el Parlamento Europeo,” dijo tajantemente García Belaunde.
Por su parte, algunos miembros del Congreso de la República pidieron la creación de una comisión especial para investigar si la institución tenía vínculos con el MRTA. A raíz de estos hechos, el 21 de mayo de 2008 la Corte Interamericana de Derechos Humanos solicitó al Estado peruano adoptar medidas necesarias para proteger la vida y la integridad física de Francisco Soberón, Miguel Jugo Viera y los demás miembros de Aprodeh.
El 21 de abril de 2022, grupos de ultraderecha se apostaron frente a las oficinas de Aprodeh en Lima. Llevaban consigo banderas con los nombres «La Resistencia», “La Insurgencia” y «Los Patriotas». Además, tenían una fotografía gigante de Gloria Cano con la frase «El MRTA no es terrorista».
Los colectivos acusaban a los miembros de Aprodeh de “terroristas”. Pegaron un letrero en la entrada del local en el que se leía “Aprodeh madriguera de terrucos”. En un automóvil había un grupo con unas camisetas que decían “asociación anticomunista”. Con altavoces en mano lanzaron arengas contra la organización, mientras registraban todo el suceso con teléfonos que transmitían en directo, vía redes sociales, lo que ocurría. Personal de Aprodeh se comunicó con las autoridades locales, pero al acudir la policía al lugar no hicieron mayor esfuerzo para detener a los manifestantes.
Grupos de ultraderecha fuera de las oficinas de Aprodeh en abril del 2022
Horas después, Aprodeh se pronunció en sus redes sociales con el siguiente mensaje:
«La libertad de expresión es respetable desde todo punto de vista, pero la difamación no, y mucho menos cuando esta se nutre de desinformación y de intentos de cambiar la historia en beneficio de la impunidad. Este violento accionar responde a las denuncias que como Aprodeh hemos realizado ante las autoridades por sus acciones de acoso y hostigamiento como parte de una organización criminal y por la frustrada liberación de Alberto Fujimori, quien una orden de la Corte Interamericana de Derechos Humanos impidió que se acate el fallo que le restituía el indulto».
Como se aprecia, Aprodeh han sido atacada en varias ocasiones. La acusación de “defender terroristas” o de estar coludidos con miembros de Sendero Luminoso o el MRTA es recurrente. El terruqueo a esta institución ha pretendido silenciar la lucha por la justicia que Aprodeh ha realizado en diversos escenarios, sobre todo el ámbito legal.
Tipo de fuentes consultadas: Recortes periodísticos (La República, Reuters, Agencia Andina y Wayka). Notas de prensa (Amnistía Internacional)
Más información
https://www.reuters.com/article/latinoamerica-politica-peru-sol-idLTAN2435902320080425 (Perú rechaza que UE no considere terrorista a MRTA) 24-04-2008 – Reuters
https://www.omct.org/es/recursos/llamamientos-urgentes/diffamation-campaign-against-aprodeh-and-its-president-dr-francisco-sober%C3%B3n (Organización Mundial Contra la Tortura: Carta Abierta al Doctor Alan García, Presidente de la República del Perú) 30-04-2008 – OMCT
https://www.amnesty.org/es/wp-content/uploads/sites/4/2021/06/amr460152004es.pdf (Amnistía Internacional: Amenazas de muerte / temor por la seguridad) 12-11-2004 – Amnistía Internacional
https://www.amnesty.org/en/wp-content/uploads/sites/4/2021/06/amr460052008spa.pdf (Amnistía Internacional: Señalamientos públicos contra defensores de derechos humanos) 15-05-2008 – Amnistía Internacional
https://www.fidh.org/es/temas/defensores-de-derechos-humanos/peru-actos-de-intimidacion-contra-la-asociacion-pro-derechos-humanos (Federación Internacional por los Derechos Humanos: Perú: Actos de intimidación contra la Asociación Pro Derechos Humanos y su directora Gloria Cano) 27-04-2022 – FIDH